28 de octubre de 2010

Una lección


Una persona me ha explicado hoy que los halcones para aprender a volar saltan desde el punto más alto de una montaña. El resto de aves aprenden poco a poco bajando por las ramas de los árboles desde las más bajas hasta que incluso serían capaces de saltar desde la copa del árbol, pero los halcones no se limitan a volar. Planean, utilizan las corrientes de aire, juegan con el viento y no comen simplemente gusanos y carroña sino que cazan sus presas. Desde la primera vez, saltan desde una altura vertiginosa desafiando las leyes de la gravedad, y cuando están a punto de quebrarse contra el suelo, tan sólo les queda levantar el vuelo o morir en el intento.

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